¡Dime amor! ¿A qué dimensión me transportas? Cuando te acercas a mí siento en mi cuerpo un jardín y mi materia primigenia vibrando como la luz, sintiendo el rocío que emana de tu piel y de tus besos.
Mi cuerpo se vuelve cristalino sintiendo que me abraza el universo sabiendo que he nacido ya en mi ocaso y de ese inconmensurable océano de amor siento la melodía de tu voz.
¡Amor! ¿quién eres? Sé que ahora viajo por los caminos del tiempo encontrando en él, un sentido desconocido con remotas dimensiones y sin saber dónde estoy.
Eres amor sin nombre, esa huella del pájaro volando, eres la alegría que en veces se vuelve lágrimas que sienten aquellos que viven en el campo y otros en las congestionadas urbes.
Eres los palpable y lo abstracto la alegría y el suplicio, el dulzón y el desencanto.
¿Sabes amor? Aprendí a sentirte sin mirarte, a calentarme en tu abrigo, a refugiarme en tu regazo, y ...aún amor, todavía no sé quién eres.
REGINA LISKA Santafé de Bogotá, 13 de febrero de 1997
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